March 29, 2022
La llegada de los aventureros a la isla no pasó inadvertida. La gente del pueblo local salieron a darles el bienvenido y invitarles a sus hogares. Las calles se llenaron de actividad: los niños colgaron lámparas en las paredes y las mujeres cocinaron todo lo que tuvieron. Los hombres se fueron a recoger fruta, cazar animales y pescar en el océano. Todo tuvo que ser perfecto para la fiesta esa noche.
Cuando los nuevos llegados se acomodaron, la fiesta comenzó con un estrépito de baterías, de flautas, de música ajena pero a la vez conocida. Rositas blancas se tiraron al aire, y pronto todo el mundo estuvo cubierto de esas florecitas. La comida y el vino llenaron los estómagos de los presentes, y había tanta alegría que casi ahogó a los asistentes.
La próxima mañana, cuando los aventureros se levantaron, se horrorizaron. De la población del pueblo solo se quedaron cadáveres. La peste apagaron a cada inhabitable del pueblo como el viento había apagado las velas la noche anterior.
Velas en la tormenta
La llegada de los aventureros a la isla no pasó inadvertida.
La gente del pueblo local salieron a darles ela bienvenido ya e invitarles a sus hogares.
Las calles se llenaron de actividad: los niños colgaron lámparas en las paredes y las mujeres cocinaron todo lo que tuvieroenían.
Los hombres se fueron a recoger fruta, cazar animales y pescar en el océano.
Todo tuvoenía que ser perfecto para la fiesta esa noche.
Cuando los nuevos allegados se acomodaron, la fiesta comenzó con un estrépito de baterías, de flautas, y de una música ajenextraña/exótica pero a la vez conocida.
RTiraron rositas blancas se tiraron al aire, y pronto todo el mundo estuvo cubierto de esas florecital aire, cubriendo rápidamente a todo el mundo con ellas.
La comida y el vino llenaron los estómagos de los presentes, y había tanta alegría que casi ahogósobrepasaba a los asistentes.
La próxima mañanaA la mañana siguiente, cuando los aventureros se levantaron, se horrorizaron.
De la poblacióEn del pueblo soólo se quedaronhabía cadáveres.
La peste apagaronó a cada inhabitable del pueblo como el viento había apagado las velas la noche anterior.
Feedback
Está muy bien, sólo he corregido algunos errores de uso. Sigue así
Velas en la tormenta This sentence has been marked as perfect! |
La llegada de los aventureros a la isla no pasó inadvertida. This sentence has been marked as perfect! |
La gente del pueblo local salieron a darles el bienvenido y invitarles a sus hogares. La gente del pueblo local salieron a darles |
Las calles se llenaron de actividad: los niños colgaron lámparas en las paredes y las mujeres cocinaron todo lo que tuvieron. Las calles se llenaron de actividad: los niños colgaron lámparas en las paredes y las mujeres cocinaron todo lo que t |
Los hombres se fueron a recoger fruta, cazar animales y pescar en el océano. This sentence has been marked as perfect! |
Todo tuvo que ser perfecto para la fiesta esa noche. Todo t |
Cuando los nuevos llegados se acomodaron, la fiesta comenzó con un estrépito de baterías, de flautas, de música ajena pero a la vez conocida. Cuando los nuevos allegados se acomodaron, la fiesta comenzó con un estrépito de baterías, |
Rositas blancas se tiraron al aire, y pronto todo el mundo estuvo cubierto de esas florecitas.
|
La comida y el vino llenaron los estómagos de los presentes, y había tanta alegría que casi ahogó a los asistentes. La comida y el vino llenaron los estómagos de los presentes, y había tanta alegría que |
La próxima mañana, cuando los aventureros se levantaron, se horrorizaron.
|
De la población del pueblo solo se quedaron cadáveres.
|
La peste apagaron a cada inhabitable del pueblo como el viento había apagado las velas la noche anterior. La peste apag |
You need LangCorrect Premium to access this feature.
Go Premium