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iamwalrus

May 10, 2020

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Descripción del cuadro "Tres de Mayo", de Francisco Goya

Tuve que describir esta pintura como una tarea para mi clase de español. Por favor, dígame si he cometido algún error.

El cuadro muestra el fusilamiento de rebeldes a las afueras de Madrid, después de que un intento de levantamiento contra José Bonaparte tuvo lugar el 2 de mayo y poco antes de la Guerra de la Independencia. A la derecha, vemos unos soldados franceses por detrás, apuntando a un rebelde español con mosquetes. Tiene las manos en alto en señal de sumisión. Los soldados llevan uniformes oscuros, están todos en la misma posición y no se les puede ver la cara. Su actitud parece exagerada: el hombre no está luchando por soltarse, y no puede huir porque hay una especie de pared de piedra detrás de él. Mientras que otras personas a su alrededor se cubren los ojos, el hombre que está a punto de ser ejecutado los deja abiertos a propósito. Incluso de rodillas, conserva su dignidad al no suplicar al enemigo que lo deje ir. Parece ser un hombre del pueblo: su cara es simple, su pelo desordenado, y su ropa no es elaborada. Pero es justamente esta sencillez que le convierte en un símbolo de la lucha popular, o quizá una figura casi crística, y son el blanco de su camisa y el amarillo de sus pantalones que inmediatamente llaman la atención de cualquiera que tenga este cuadro delante de él. El hecho de que sea capaz de controlar el miedo que podemos leer en su cara es algo así como un desafío final: significa que incluso en la muerte, no se habrá dedo por vencido, y entonces no habrá perdido realmente. Podemos deducir de este cuadro que, según Goya, el héroe no es infalible, pero su grandeza nunca desaparece. Los soldados franceses pueden sentir un profundo odio, pero él está tranquilo y aceptando. Por todas estas razones, el hombre en cuestión puede ser visto como un héroe, y como la pintura fue encargada por el gobierno provisional español, contribuye a la construcción de un mito en torno a la resistencia contra “La Grande Armée”.

Corrections

Por favor, díga(n)me si he cometido algún error.

El cuadro muestra el fusilamiento de rebeldes a las afueras de Madrid, después de que un intento de levantamiento contra José Bonaparte tuvoiera lugar el 2 de mayo y poco antes de la Guerra de la Independencia.

A la derecha, vemos unos soldados franceses por detrás, apuntando a un rebelde español con mosquetes.

Tiene las manos en alto en señal de sumisión.

Su actitud parece exagerada: el hombre no está luchando por soltarse, y no puede huir porque hay una especie de pared de piedra detrás de él.

Parece ser un hombre del pueblo: su cara es simple, su pelo desordenado, y su ropa no es elaborada.

Pero es justamente esta sencillez la que le convierte en un símbolo de la lucha popular, o quizá una figura casi crística, y son el blanco de su camisa y el amarillo de sus pantalones los que inmediatamente llaman la atención de cualquiera que tenga este cuadro delante de él.

El hecho de que sea capaz de controlar el miedo que podemos leer en su cara es algo así como un desafío final: significa que incluso en la muerte, no se habrá dedo por vencido, y entonces no habrá perdido realmente.

Feedback

Muy bien! La verdad es que las correciones que pude encontrar me parecen más una cuestión de estilo que de gramática, seguramente te va a ir bien con tu tarea

Descripción del cuadro "Tres de Mayo", de Francisco Goya

Tuve que describir esta pintura como una tarea para mi clase de español.

Por favor, dígame si he cometido algún error.

Por favor, díga(n)me si he cometido algún error.

El cuadro muestra el fusilamiento de rebeldes a las afueras de Madrid, después de que un intento de levantamiento contra José Bonaparte tuvo lugar el 2 de mayo y poco antes de la Guerra de la Independencia.

El cuadro muestra el fusilamiento de rebeldes a las afueras de Madrid, después de que un intento de levantamiento contra José Bonaparte tuvoiera lugar el 2 de mayo y poco antes de la Guerra de la Independencia.

A la derecha, vemos unos soldados franceses por detrás, apuntando a un rebelde español con mosquetes.

Tiene las manos en alto en señal de sumisión.

Los soldados llevan uniformes oscuros, están todos en la misma posición y no se les puede ver la cara.

Su actitud parece exagerada: el hombre no está luchando por soltarse, y no puede huir porque hay una especie de pared de piedra detrás de él.

Su actitud parece exagerada: el hombre no está luchando por soltarse, y no puede huir porque hay una especie de pared de piedra detrás de él.

Mientras que otras personas a su alrededor se cubren los ojos, el hombre que está a punto de ser ejecutado los deja abiertos a propósito.

Incluso de rodillas, conserva su dignidad al no suplicar al enemigo que lo deje ir.

Parece ser un hombre del pueblo: su cara es simple, su pelo desordenado, y su ropa no es elaborada.

Parece ser un hombre del pueblo: su cara es simple, su pelo desordenado, y su ropa no es elaborada.

Pero es justamente esta sencillez que le convierte en un símbolo de la lucha popular, o quizá una figura casi crística, y son el blanco de su camisa y el amarillo de sus pantalones que inmediatamente llaman la atención de cualquiera que tenga este cuadro delante de él.

Pero es justamente esta sencillez la que le convierte en un símbolo de la lucha popular, o quizá una figura casi crística, y son el blanco de su camisa y el amarillo de sus pantalones los que inmediatamente llaman la atención de cualquiera que tenga este cuadro delante de él.

El hecho de que sea capaz de controlar el miedo que podemos leer en su cara es algo así como un desafío final: significa que incluso en la muerte, no se habrá dedo por vencido, y entonces no habrá perdido realmente.

El hecho de que sea capaz de controlar el miedo que podemos leer en su cara es algo así como un desafío final: significa que incluso en la muerte, no se habrá dedo por vencido, y entonces no habrá perdido realmente.

Podemos deducir de este cuadro que, según Goya, el héroe no es infalible, pero su grandeza nunca desaparece.

Los soldados franceses pueden sentir un profundo odio, pero él está tranquilo y aceptando.

Por todas estas razones, el hombre en cuestión puede ser visto como un héroe, y como la pintura fue encargada por el gobierno provisional español, contribuye a la construcción de un mito en torno a la resistencia contra “La Grande Armée”.

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